Tanto la iluminación adecuada como la vigilancia y control sanitario de alimentos y bebidas son aspectos fundamentales para garantizar la salud y seguridad de las personas en distintos contextos.
La iluminación adecuada en lugares de trabajo y espacios públicos es esencial para prevenir accidentes, reducir la fatiga visual, mejorar la productividad y crear un entorno seguro y saludable. Una iluminación inadecuada puede dar lugar a situaciones peligrosas, como caídas o lesiones, y afectar negativamente la salud de los trabajadores.
En esta publicación, explicaremos más sobre la iluminación en la industria de la alimentación y las bebidas.
🤝La normativa sobre la iluminación en la industria alimentaria
En el Perú, la vigilancia y control sanitario de alimentos y bebidas, se encuentra regulada por el Decreto Supremo N° 007-98-SA.
De acuerdo al artículo 34 de la norma antes mencionada, los establecimientos industriales deben mantener una iluminación adecuada, la cual puede ser complementada con iluminación artificial.
Esta iluminación debe ser acorde al tipo de trabajo, considerando los siguientes estándares mínimos:
- 540 Lux en las áreas donde se ejecute un examen detallado del producto.
- 220 Lux en las zonas de producción.
- 110 Lux en otras zonas de la industria.
Mediante el DS 007-98-SA se busca garantizar que los alimentos que llegan a la población sean seguros para el consumo humano.
Esto implica la inspección y supervisión de toda la cadena de producción de alimentos, desde su elaboración hasta su venta final, con el fin de prevenir enfermedades transmitidas por alimentos y garantizar la calidad e inocuidad de los productos que llegan a los consumidores.
📣Conclusiones finales
La iluminación adecuada es un aspecto fundamental para garantizar la seguridad y salud de las personas. La iluminación adecuada previene accidentes y mejora la calidad de vida en el entorno laboral y público, mientras que la vigilancia y control sanitario de alimentos y bebidas asegura que los productos sean seguros y de alta calidad. Cumplir con los estándares en estos campos es esencial para prevenir riesgos y promover una sociedad más saludable.